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Elizabeth Katrynna Báthory [ACEPTADA]
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Elizabeth Katrynna Báthory [ACEPTADA]
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Nombre:
Elizabeth Katrynna Báthory Ecsedy
Nota: En ocasiones se hace llamar Katrynna Súcubo para ocultar su verdadera identidad.
Edad:
-Aparente: 18 años.
-Real: poco más de 450 años.
Sexo:
Mujer.
Raza:
Vampiro.
Clase:
Sangre pura / Elitista
Orientación sexual:
Heterosexual.
Descripción física:
Mide 1,65 de estatura. No le gusta hablar respecto a su peso, pero este es, aproximadamente de 55kg. Posee una cabellera rojiza, lisa y larga hasta debajo de su cadera, con unos suaves rizos en las puntas, y su flequillo le cubre ocasionalmente el ojo izquierdo. Su piel es sumamente pálida. Sus ojos poseen un color variable entre ámbar y carmesí, que cambia dependiendo de su humor o su sed de sangre. Posee una contextura delgada aunque con grandes atributos, su apariencia es delicada y frágil. Puede parecer muy dócil y hasta dulce, esta chica enseñará que las apariencias engañan. Muchas veces podrá parecer despistada, y hasta sorprendida si intentan asustarla, pero esto realmente no sucederá, es demasiado consciente de su entorno como para ello.
Su vestuario puede ser algo excéntrico o muy sencillo, dependerá de la ocasión, el clima y su humor.
Descripción psicológica:
Debido a su alto rango, su poder, belleza física y elevado intelecto, es muy ególatra; además de arrogante y odiosa. Generalmente rebaja a los demás por cualquier o ninguna razón en absoluto, principalmente a los humanos.
Siente un odio absolutamente racional hacia los humanos, por su irresponsabilidad con el planeta que los acoge y porque fue testigo de sus fechorías: ha visto como se matan entre ellos por cosas vanas, como matan animales inocentes por diversión; por esto y más les pagó durante mucho tiempo con el mismo trato, haciéndose festines donde ellos eran su alimento. Y algo mucho más superficial por lo que los odia, es que son débiles de cuerpo, mente y espíritu, demasiado manipulables, una raza inferior. Aun así, se limita a escoger criminales como presas.
Más allá de los humanos, su repulsión se extiende hacia los vampiros de bajo rango, aquellos que fueron humanos alguna vez y que podrían perder el control en cualquier momento; estas creaturas le causan verdadero asco, por lo que evitará lo más posible crear una de estas aberraciones de la naturaleza, cuidándose de beber hasta la última gota de sangre de aquellos que se conviertan en sus presas.
A pesar de su asco y odio tanto a los humanos como los vampiros de bajo rango, su forma de actuar frente a estos no es explosiva ni psicópata; realmente es muy buena actriz y podrá simular ser agradable con estos aunque realmente esté deseando alejarse o alimentarse con ellos. Ante todo es una chica educada y muy elegante, aunque también rebelde excéntrica y extravagante. En pocas palabras podría decirse que esta chica es un mar de contradicciones, además de impredecible.
Gustos y disgustos:
Gustos:
-Deportes extremos.
-Jugar con la mente de las personas.
-Golosinas y comida chatarra.
-Cosas saladas o ácidas.
-Flirtear.
Disgustos:
-Vampiros de nivel D y nivel E.
-La debilidad, sea suya o de alguien más.
-Cosas dulces, a menos que también sean ácidas.
Curso:
Secundaria alta, segundo año. Clase de la Luna
Historia:
Húngara, nacida el 7 de agosto de 1560, Condesa de Ecsed.
Elizabeth nació en una de las familias aristocráticas más importantes y de mayor renombre para la época en Hungría. Una familia de vampiros muy famosa por sus excentricidades. La primogénita de Anna y George Báthory, primos hermanos, a diferencia de la mayoría de las mujeres de su época, fue bien instruida desde temprana edad, sobrepasando incluso a la mayoría de los hombres: hablaba y escribía perfectamente húngaro, latín y alemán, mientras que muchos no podían ni escribir bien en su idioma materno.
Aquella época en que ella y su hermana menor se desarrollaban fue una de las más tranquilas en cuanto a guerras entre humanos y vampiros, y dado que su familia era temida y respetada en aquel territorio, no fue necesario el pronto entrenamiento de sus habilidades natas, más aún cuando su padre y madre intentaban redimir las acciones de sus antepasados convirtiéndose en vegetarianos e inculcando esto a sus dos hijas; en pocas palabras, no probó nunca sangre humana mientras vivió bajo la protección de su familia.
La naturaleza independiente y rebelde de Elizabeth la llevó a salir pronto de casa, con el deseo prematuro de conocer más mundo del que sus padres le permitían. Habría querido llevarse consigo a su pequeña hermana, pero sabía que podría meterse en problemas y no se perdonaría que fuera Isabella la que pagara por sus acciones. Así fue, su apariencia joven y hermosa, llamaba poderosamente la atención de humanos y vampiros por donde sea que ella fuese, y muchos de ellos intentaron extorsionarla e incluso abusar de ella, sin saber que le hacían el favor de dejarla matarlos con la excusa “en defensa propia” a la vez que entrenaba sus poderes y conocía los placeres que la sangre de estos podía proporcionar.
Los años que pasó sola le sirvieron para aprender y conocer de ese mundo exterior a su castillo que sus padres nunca quisieron que ella conociera, la hicieron madurar en muchos aspectos, aunque siguiera siendo la misma caprichosa, ya que incluso por sí misma y sin una moneda en el bolsillo, como había empezado, consiguió ganar dinero y hacerse con su propia fortuna, aunque fuese más pequeña que la de su familia, era suya y nadie podría considerar quitársela. Descubrió que podía lograr lo que quisiera por sí misma.
Tras haber pasado unas cuantas décadas lejos de su familia, regresó con la cabeza en alto, sabiendo que seguramente habrían escuchado mucho de ella en ese tiempo. Se le acusaba de múltiples asesinatos, cosa que apenaba a sus padres pero enorgullecía a su abuelo y el resto de su familia, quienes pensaban de sus padres que eran demasiado blandos para ser parte de la Casa Báthory, procreadora de los más sanguinarios vampiros de aquella época, y Elizabeth hasta el momento iba en camino a superar a su querido abuelo.
Anna y George se negaron a recibirla bajo se techo nuevamente, incluso se negaron a que viera a su pequeña hermana de nuevo, pues significaría una mala influencia para ella. Ante tales argumentos Elizabeth prefirió permanecer alejada, dado que aunque no compartía los gustos de sus padres, los respetaba, y sabía lo pura que podía ser Isabella, quien no conocía las cosas horrendas que podían hacer los humanos por poder, quienes eran incluso más crueles que los vampiros con su propia especie. No quería contaminar la mente pura de Bella, ni contagiarla de su odio racional por la raza humana.
Tras muchos años más de traviesos asesinatos que quedaban impunes llegó una era que rebajó a los vampiros, incluso los más poderosos, a pasarse por humanos, ya que aunque tenían poder, eran superados infinitamente en cantidad por los humanos. Dado este cambio, la Casa Báthory junto a otras familias igual de sanguinarias con sus “presas” tuvieron que contenerse, cosa que al principio se les dificultó muchísimo, y fue donde Anna, George y Isabella quedaron como los representantes de la familia, pues eran los únicos que podían controlarse sin problema con los humanos.
Elizabeth, que odiaba quedarse atrás por cualquier motivo, se obligó a si misma a controlarse, había vivido las primeras décadas de su vida sin probar sangre humana, podría volver a hacerlo. Mostró una falsa fuerza de voluntad, y volvió a salir a las calles. Su secreto era que seguía matando gente, sólo que ya no hacía los espectáculos de antes, que se daba festines con locales completos. Aprendió a pasar desapercibida, e ir presa por presa.
Las épocas cambian y se repiten, cosa que los vampiros con todos sus años de vida pueden apreciar, pero que para los humanos es simple historia. Para el siglo XX comenzó de nuevo a escucharse de muertes inexplicables, en diversas partes del mundo, y para el siglo XXI se rumoreaba de una Academia en Japón donde humanos y vampiros “convivían” en paz. Al principio la idea le pareció repulsiva, pero después lo vio como una forma de tener alimento fácil, además que estaba ya cansada de tanto viajar y ver siempre lo mismo. Decidió que iría al que era quizás el único país que no conocía y se daría unas lindas vacaciones. “Esto será como un hotel 5 estrellas pero más económico y divertido” se dijo a sí misma, aunque en realidad también iba porque, según una fuente que ella creía confiable, su abuelo, Isabella iría allí, y tenía deseos de ver a su hermana aunque esta no le recordara. Aunque pronto se daría cuenta que todo había sido una trampa de sus padres y que estos le ocultaban una verdad que sería para ella realmente dolorosa.
Habilidad:
Magnetismo animal: es, básicamente, un proceso de hipnosis mediante el cual es capaz de guiar, o dirigir, los pensamientos, sueños o comportamientos de otros, lo que le permite manipular en cierto grado la mente de sus víctimas. Dicha habilidad no es ineludible, Katrynna se infiltrará en la mente de sus víctimas, pero está en ellos el creer o no lo que ella allí escribe o modifica; aunque claro, nunca es fácil distinguir entre la fantasía y la realidad.
Técnicas:
-Manipulación onírica: o manipulación de los sueños, le permite observar o modificar los sueños de quienes invade. Para poder llevar a cabo esta técnica, evidentemente, la víctima debe estar dormida y Katrynna debe tener algún contacto con su cuerpo.
-Trastorno: confusión o cambio de realidad. Kat tiene la habilidad de hacer creer a otros que se encuentran en otro lugar, con otras personas, en otra situación. Puede introducirles en la mente realidades diferentes a las que viven en cierto momento, incluso alterando sus recuerdos. Pueden ser tan fantasiosas o realistas como quiera. Ésta habilidad es más efectiva con los humanos, mientras mayor rango tenga el vampiro, es menos efectiva con él.
-Seducción: como su nombre lo indica, implica la atracción de seres vivos hacia ella, una especie de débil enamoramiento que durará todo el tiempo que ella se mantenga hipnotizando a su presa. Esta se la limita a los hombre, sean humanos o vampiros, aun así y contrario a Trastorno, es más efectiva en Vampiros que en Humanos.
Otros datos y peculiaridades:
-Es realmente pervertida, y es éste quizás el único rasgo de si misma por el que puede llegar a sentir vergüenza.
-Su mascota es un pequeño ratón blanco de ojos carmesíes que siempre va con ella, bien sea en su hombro, en su mano o algún bolsillo lo suficientemente grande para él.
----
Nombre del anime/manga/videojuego:
Shin Megami Tensei
Nombre del personaje original:
Kirijou Mitsuru
Elizabeth Katrynna Báthory Ecsedy
Nota: En ocasiones se hace llamar Katrynna Súcubo para ocultar su verdadera identidad.
Edad:
-Aparente: 18 años.
-Real: poco más de 450 años.
Sexo:
Mujer.
Raza:
Vampiro.
Clase:
Sangre pura / Elitista
Orientación sexual:
Heterosexual.
Descripción física:
Mide 1,65 de estatura. No le gusta hablar respecto a su peso, pero este es, aproximadamente de 55kg. Posee una cabellera rojiza, lisa y larga hasta debajo de su cadera, con unos suaves rizos en las puntas, y su flequillo le cubre ocasionalmente el ojo izquierdo. Su piel es sumamente pálida. Sus ojos poseen un color variable entre ámbar y carmesí, que cambia dependiendo de su humor o su sed de sangre. Posee una contextura delgada aunque con grandes atributos, su apariencia es delicada y frágil. Puede parecer muy dócil y hasta dulce, esta chica enseñará que las apariencias engañan. Muchas veces podrá parecer despistada, y hasta sorprendida si intentan asustarla, pero esto realmente no sucederá, es demasiado consciente de su entorno como para ello.
Su vestuario puede ser algo excéntrico o muy sencillo, dependerá de la ocasión, el clima y su humor.
- Apariencia:
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Descripción psicológica:
Debido a su alto rango, su poder, belleza física y elevado intelecto, es muy ególatra; además de arrogante y odiosa. Generalmente rebaja a los demás por cualquier o ninguna razón en absoluto, principalmente a los humanos.
Siente un odio absolutamente racional hacia los humanos, por su irresponsabilidad con el planeta que los acoge y porque fue testigo de sus fechorías: ha visto como se matan entre ellos por cosas vanas, como matan animales inocentes por diversión; por esto y más les pagó durante mucho tiempo con el mismo trato, haciéndose festines donde ellos eran su alimento. Y algo mucho más superficial por lo que los odia, es que son débiles de cuerpo, mente y espíritu, demasiado manipulables, una raza inferior. Aun así, se limita a escoger criminales como presas.
Más allá de los humanos, su repulsión se extiende hacia los vampiros de bajo rango, aquellos que fueron humanos alguna vez y que podrían perder el control en cualquier momento; estas creaturas le causan verdadero asco, por lo que evitará lo más posible crear una de estas aberraciones de la naturaleza, cuidándose de beber hasta la última gota de sangre de aquellos que se conviertan en sus presas.
A pesar de su asco y odio tanto a los humanos como los vampiros de bajo rango, su forma de actuar frente a estos no es explosiva ni psicópata; realmente es muy buena actriz y podrá simular ser agradable con estos aunque realmente esté deseando alejarse o alimentarse con ellos. Ante todo es una chica educada y muy elegante, aunque también rebelde excéntrica y extravagante. En pocas palabras podría decirse que esta chica es un mar de contradicciones, además de impredecible.
Gustos y disgustos:
Gustos:
-Deportes extremos.
-Jugar con la mente de las personas.
-Golosinas y comida chatarra.
-Cosas saladas o ácidas.
-Flirtear.
Disgustos:
-Vampiros de nivel D y nivel E.
-La debilidad, sea suya o de alguien más.
-Cosas dulces, a menos que también sean ácidas.
Curso:
Secundaria alta, segundo año. Clase de la Luna
Historia:
Húngara, nacida el 7 de agosto de 1560, Condesa de Ecsed.
Elizabeth nació en una de las familias aristocráticas más importantes y de mayor renombre para la época en Hungría. Una familia de vampiros muy famosa por sus excentricidades. La primogénita de Anna y George Báthory, primos hermanos, a diferencia de la mayoría de las mujeres de su época, fue bien instruida desde temprana edad, sobrepasando incluso a la mayoría de los hombres: hablaba y escribía perfectamente húngaro, latín y alemán, mientras que muchos no podían ni escribir bien en su idioma materno.
Aquella época en que ella y su hermana menor se desarrollaban fue una de las más tranquilas en cuanto a guerras entre humanos y vampiros, y dado que su familia era temida y respetada en aquel territorio, no fue necesario el pronto entrenamiento de sus habilidades natas, más aún cuando su padre y madre intentaban redimir las acciones de sus antepasados convirtiéndose en vegetarianos e inculcando esto a sus dos hijas; en pocas palabras, no probó nunca sangre humana mientras vivió bajo la protección de su familia.
La naturaleza independiente y rebelde de Elizabeth la llevó a salir pronto de casa, con el deseo prematuro de conocer más mundo del que sus padres le permitían. Habría querido llevarse consigo a su pequeña hermana, pero sabía que podría meterse en problemas y no se perdonaría que fuera Isabella la que pagara por sus acciones. Así fue, su apariencia joven y hermosa, llamaba poderosamente la atención de humanos y vampiros por donde sea que ella fuese, y muchos de ellos intentaron extorsionarla e incluso abusar de ella, sin saber que le hacían el favor de dejarla matarlos con la excusa “en defensa propia” a la vez que entrenaba sus poderes y conocía los placeres que la sangre de estos podía proporcionar.
Los años que pasó sola le sirvieron para aprender y conocer de ese mundo exterior a su castillo que sus padres nunca quisieron que ella conociera, la hicieron madurar en muchos aspectos, aunque siguiera siendo la misma caprichosa, ya que incluso por sí misma y sin una moneda en el bolsillo, como había empezado, consiguió ganar dinero y hacerse con su propia fortuna, aunque fuese más pequeña que la de su familia, era suya y nadie podría considerar quitársela. Descubrió que podía lograr lo que quisiera por sí misma.
Tras haber pasado unas cuantas décadas lejos de su familia, regresó con la cabeza en alto, sabiendo que seguramente habrían escuchado mucho de ella en ese tiempo. Se le acusaba de múltiples asesinatos, cosa que apenaba a sus padres pero enorgullecía a su abuelo y el resto de su familia, quienes pensaban de sus padres que eran demasiado blandos para ser parte de la Casa Báthory, procreadora de los más sanguinarios vampiros de aquella época, y Elizabeth hasta el momento iba en camino a superar a su querido abuelo.
Anna y George se negaron a recibirla bajo se techo nuevamente, incluso se negaron a que viera a su pequeña hermana de nuevo, pues significaría una mala influencia para ella. Ante tales argumentos Elizabeth prefirió permanecer alejada, dado que aunque no compartía los gustos de sus padres, los respetaba, y sabía lo pura que podía ser Isabella, quien no conocía las cosas horrendas que podían hacer los humanos por poder, quienes eran incluso más crueles que los vampiros con su propia especie. No quería contaminar la mente pura de Bella, ni contagiarla de su odio racional por la raza humana.
Tras muchos años más de traviesos asesinatos que quedaban impunes llegó una era que rebajó a los vampiros, incluso los más poderosos, a pasarse por humanos, ya que aunque tenían poder, eran superados infinitamente en cantidad por los humanos. Dado este cambio, la Casa Báthory junto a otras familias igual de sanguinarias con sus “presas” tuvieron que contenerse, cosa que al principio se les dificultó muchísimo, y fue donde Anna, George y Isabella quedaron como los representantes de la familia, pues eran los únicos que podían controlarse sin problema con los humanos.
Elizabeth, que odiaba quedarse atrás por cualquier motivo, se obligó a si misma a controlarse, había vivido las primeras décadas de su vida sin probar sangre humana, podría volver a hacerlo. Mostró una falsa fuerza de voluntad, y volvió a salir a las calles. Su secreto era que seguía matando gente, sólo que ya no hacía los espectáculos de antes, que se daba festines con locales completos. Aprendió a pasar desapercibida, e ir presa por presa.
Las épocas cambian y se repiten, cosa que los vampiros con todos sus años de vida pueden apreciar, pero que para los humanos es simple historia. Para el siglo XX comenzó de nuevo a escucharse de muertes inexplicables, en diversas partes del mundo, y para el siglo XXI se rumoreaba de una Academia en Japón donde humanos y vampiros “convivían” en paz. Al principio la idea le pareció repulsiva, pero después lo vio como una forma de tener alimento fácil, además que estaba ya cansada de tanto viajar y ver siempre lo mismo. Decidió que iría al que era quizás el único país que no conocía y se daría unas lindas vacaciones. “Esto será como un hotel 5 estrellas pero más económico y divertido” se dijo a sí misma, aunque en realidad también iba porque, según una fuente que ella creía confiable, su abuelo, Isabella iría allí, y tenía deseos de ver a su hermana aunque esta no le recordara. Aunque pronto se daría cuenta que todo había sido una trampa de sus padres y que estos le ocultaban una verdad que sería para ella realmente dolorosa.
Habilidad:
Magnetismo animal: es, básicamente, un proceso de hipnosis mediante el cual es capaz de guiar, o dirigir, los pensamientos, sueños o comportamientos de otros, lo que le permite manipular en cierto grado la mente de sus víctimas. Dicha habilidad no es ineludible, Katrynna se infiltrará en la mente de sus víctimas, pero está en ellos el creer o no lo que ella allí escribe o modifica; aunque claro, nunca es fácil distinguir entre la fantasía y la realidad.
Técnicas:
-Manipulación onírica: o manipulación de los sueños, le permite observar o modificar los sueños de quienes invade. Para poder llevar a cabo esta técnica, evidentemente, la víctima debe estar dormida y Katrynna debe tener algún contacto con su cuerpo.
-Trastorno: confusión o cambio de realidad. Kat tiene la habilidad de hacer creer a otros que se encuentran en otro lugar, con otras personas, en otra situación. Puede introducirles en la mente realidades diferentes a las que viven en cierto momento, incluso alterando sus recuerdos. Pueden ser tan fantasiosas o realistas como quiera. Ésta habilidad es más efectiva con los humanos, mientras mayor rango tenga el vampiro, es menos efectiva con él.
-Seducción: como su nombre lo indica, implica la atracción de seres vivos hacia ella, una especie de débil enamoramiento que durará todo el tiempo que ella se mantenga hipnotizando a su presa. Esta se la limita a los hombre, sean humanos o vampiros, aun así y contrario a Trastorno, es más efectiva en Vampiros que en Humanos.
Otros datos y peculiaridades:
-Es realmente pervertida, y es éste quizás el único rasgo de si misma por el que puede llegar a sentir vergüenza.
-Su mascota es un pequeño ratón blanco de ojos carmesíes que siempre va con ella, bien sea en su hombro, en su mano o algún bolsillo lo suficientemente grande para él.
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Shin Megami Tensei
Nombre del personaje original:
Kirijou Mitsuru
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Katrynna- Sangre pura
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