Sora Kotoha [R-Li]

NOMBRE DEL PERSONAJE: Kotoha Soraru (prefiere que le digan Sora)
NATURALEZA: Humano /Prefecto
SEXO: M
EDAD: 17
CURSO: 2º
CLASE: Sol
APARIENCIA: Es alto, mide 1,93, pesa 76 kilos, tiene un cuerpo delgado, pelo algo alborotado, pocas veces se lo peina, o tanto, el color de su pelo se asemeja al de los ojos, solo que es un azulado bastante oscuro y apagado, posee una cara aniñada y bastante joven, aparenta menos de su edad real, sus ojos son de un azul bastante oscuro y grisáceo, bastante raro, no aprecia mucho sus ojos y tampoco le presta mucha atención a ello, su piel es bastante clara, tampoco va mucho a la playa y mucho menos para ponerse bronceado. También posee un tatuaje en el brazo izquierdo, a partir de la muñeca una serie de enredaderas con espinas se elevan hasta su hombro, acabando enredadas en una flor de loto que representa el corazón de Soraru. Ha veces, de vez en cuando se pinta las uñas, lo ve divertido y como un entretenimiento alternativo al aburrimiento.
IMAGEN:

Spoiler:

PSICOLOGÍA: Es bastante callado cuando esta con desconocidos, aunque con las chicas de su edad se suele soltar mas que con cualquier persona, sea mujer o hombre, es divertido y alegre, intenta no mostrarlo mucho si no conoce a la persona en cuestión a la que le llega la expresión de Soraru, es decir cuando Soraru se expresa ante alguien que no conoce pues suele ser algo rígido ha veces, pero depende de la persona y de el humor de Soraru, pero por lo general suele ser amable, pacifico, callado y poco hablador(solo con gente extraña), igualmente, si entabla conversación con esa persona Soraru hará todo lo posible para ver y conocer como es la persona, si le gusta hablara mas de lo debido, si no, apenas emitirá dialogo, solo se expresara a base del rostro y alguna que otra frase, pero también depende, igualmente no le suele caer mal casi nadie, solo a las personas que le miran por encima del hombro. En su mayoría Soraru suele ser bastante conformista, y si hay una pelea de dialogo a los 5 minutos de la discusión quizás el piense que se esta equivocando si la discusión no llega a ningún lado, el reconoce sus errores muy a menudo y no suele ser orgulloso, porque para el ser orgulloso es una forma de egoísmo.
Nunca espera nada a cambio de una buena acción, y mucho menos le gusta depender de los demás, no por orgullo, simplemente por principios, suele ser confiado también, además le gusta ser romántico, de una manera muy tranquila, por así decirlo le gusta tanto la poesía que quizás deleite a una persona algunas frases suyas o escogidas de algún libro, no le gusta que le interrumpan, se pondrá muy agresivo, cosa que no le gusta. Se contradice a si mismo cuando habla con un desconocido, si llega a confiar en el expresara algo mas que simples y sueltas palabras, como ha tenido pocos amigos pues los cuida como un tesoro, si llegara al caso de una amistad, con una chica le cuesta mas, porque no es el mismo sexo y él pues… no es lo mismo y quizás se le note algo diferente hablar con una chica desconocida, hasta que le coge confianza, ahí tratara mas confiadamente a una chica que también cuidara como un tesoro, eso si, nunca expresara facialmente algo exagerado, solo una simple risita, apenas arrugara su piel de la cara, no suele emocionarse mucho… créanme es muuuuuyy seco, apenas sonríe, si esta triste es por algo muy grave y que le ha afectado bastante, poco común y que solo mostrara a personas de confianza.
HISTORIA: -Diecisiete años antes-
Entre cada calle y cada lugar de la ciudad de Tokyo, Japón se escuchaban los llantos de mi madre, estaba dando a la luz, mi nacimiento estaba en camino, mi padre estaba agarrando la mano de mi madre con fuerza, dándole esperanza, esperanza para salir viva de aquel parto, yo estaba tardando en salir, la agonía de mi madre en el parto me hacia estremecerme, pero empujón tras empujón por fin pude salir de su cavidad uterina.
Nada mas salir me envolvieron en una manta, y mi madre me acogió con sus templados brazos, estaba sudorosa y jadeaba, estaba feliz, pero a la vez entristecida, el dolor le había dejado un profundo y agudo sentimiento de agonía, pero todo se arregló nada mas con verme llorar, mis llantos se escuchaban por todo el hospital, mi padre también estaba contento, habían tenido a su primer varón… y el ultimo.

-10 años Después-
Prácticamente, a mis ocho años descubrí, que la vida no es tan bonita como la pintaban mis padres, ellos eran imperfectos, tenían sus defectos, mi padre se volvió alcohólico con los años, mi madre fumaba por la ansiedad y las innumerables facturas que nos llegaban y se acumulaban, ellos pensaban que yo era inconsciente de lo que ocurría, a mis diez años, fue la primera vez que mi padre me grito por romper sin querer un vaso, me dijo que no estábamos como para gastar dinero y me arreo un guantazo, y me llamo patético y patoso.
Yo en el colegio era de los primeros, aparentando ser normal, veía a tanta gente, con unos padres amables y que no parecía que les fuera tan mal, y todos vestían con ropa de marca, sin embargo yo, siempre iba de rebajas y mi calzado tenia inmensidad de aberturas.
No tenia envidia para nada, solo que en todos mis cumpleaños deseaba que todo fuera a mejor… y no fue así.

-4años después-
El día de mi decimocuarto cumpleaños, deseaba con ansias llegar a mi casa, para enseñar todos los regalos que me habían echo en el instituto, por ser uno de los mejores alumnos.
Al llegar a mi casa, nadie respondía, era raro, normalmente siempre se asomaba mi madre por la ventana del segundo piso para decirme que ya iba. Pero esa vez no lo hizo.
No me quedo más remedio que usar la llave de abajo y subí por las escaleras como alma que lleva el diablo.
Cuando llegue la puerta de mi casa estaba abierta, mi primera impresión fue de desconfianza, nunca dejábamos la puerta abierta, y menos en este barrio.
Entre con cuidado, la cerradura estaba destrozada, todo estaba desordenado, y vi a mi padre sentado en el sofá, así que me tranquilice un poco y le pregunte a mi padre que había sucedido, que porque estaba la casa patas arriba, pero no me contesto, fui a la cocina para ver si estaba mi madre ahí… si, estaba pero… pero colgando del ventilador con aspas del techo, tenia el cuello degollado y un tiro en el pecho y se había desangrado como un cerdo, la cocina estaba echa un desastre, y olía a gas.
Empecé a escuchar unos pasos que provenían del salón, lo primero que hice fue derramar lagrimas y sollozar mordiéndome el labio, fui hacia el salón rápidamente y vi que mi padre estaba sentado en el sofá… con un puñal clavado en la garganta, entonces deduje que esos pasos… eran de otra persona, mis pelos se pusieron de punta y salí corriendo de mi casa, asustado, se me cayo la mochila, alguien, alguien había entrado en mi casa y había asesinado a mis padres ¿pero quien? No tenía tiempo para pensar, solo para huir por mi vida.

-2años después-
Dos años de mi vida vagabundee por todo Japón, no tenia a donde ir, hasta que una banda callejera me adopto por así decirlo, y me usaban para ganar peleas callejeras, debido al rencor que guardaba en mi interior por mi pasado, comente a los tipos si conocían a Hayate Kotoha y a Mizusu Yukazuri, pero no me respondieron, me dijeron que ellos eran mi nueva familia y que si quería conseguir dinero y comida, tendría que ganar peleas, como un perro callejero, no me gustaba pelear, pero no me quedaba mas remedio, estaba harto de la fruta podrida de la basura, los cachos de panes aguados y con hongos y los restos… y agua en mal estado.
Mi primera pelea fue muy desastrosa, casi muero, el tipo era incluso mas alto que yo y mucho mas fornido, yo…bueno era prácticamente un alfeñique al lado de ese mastodonte, gane gracias a los objetos afilados que encontré en la basura que estaba al lado del lugar de la pelea, y como no estaban prohibidas pues aproveche, desconocía esa parte de mi, e incluso me asustaba. Solo pensaba que se había abierto un nuevo mundo para mi, y que no era el correcto.

-Actualmente-
Después de tantos combates y persecuciones policiales, llego un día en el que me canse de todo esto, no podía vengarme por lo que le había ocurrido a mi familia, así que di por perdida aquella esperanza, no tenia ninguna pista, y mucho menos sabia ya donde vivía…Mi vida había perdido el sentido, así que en mi ultima pelea, considerada por mi, me deje vencer, pero salió mal, como de costumbre mis planes nunca salían bien, y hubo una redada policial antes de empezar a combatir, todos salieron huyendo menos yo… estaba congelado, mis pensamientos nublaron mi vista, cuando alfin reaccioné y me escondí donde pude, lo mas seguro fue en medio de dos edificios, junto con otros chicos, nadie nos vió..para mi suerte.
Un mes despues, luego de vagar denuevo encontré una academia donde se decia que habitaban seres sobre naturales, la verdad no me lo creía.y entré de todas formas.
ARMA : Nada mas que una katana reforzada con material anti-vampiros.
OTROS DATOS :No siempre recita frases, ya que son limitadas y llevaría su inspiración a al decadencia, además que intenta ser creativo y crear las suyas propias, pero admira la poesía.
-¿Qué le Gusta?:
La Poesía
Leer Libros (sobre todo los de literatura universal)
Los objetos afilados de metal.
Las chocolatinas con caramelo.
Las flores (Dahlia)
Zumos de fruta (Kiwi, Naranja, melón)
La música metal, el dubstep y drumb and bass
Las películas de comedia.
La comedia en si.
Las frases célebres.


-¿Qué no le gusta?:
El anís
El alcohol
El membrillo
Las pasas
La música pop
La carne de vaca.
Las personas ricas.
Las personas egocéntricas.
Que le insulten.

-Manías: Recitar de vez en cuando alguna frase que ha leído en algún libro o ha visto en alguna película, le hace sentirse bien, además de jugar de vez en cuando con su anillo de plata, pero lo que mas hace es mencionar alguna frase de vez en cuando.


REGISTRO DE TU AVATAR.
Usuario: Sora Kotoha
Nombre personaje: Soraru
Anime/manga: Nico Nico Singer
“prometo Cuidar mi ortografía”